racimo politeísta

mirá
si tuviese
cien pijas
en un racimo politeísta
y vos fueses
el pez payaso
de mis penes como anémona,
sorbiendo aquí
y allá
flotando en
el suave crepúsculo
marítimo-habitacional
que rodee
mi cuerpo,
mis volcancitos de coral
eructando
suaves nubes seminales
aquí y allá
y yo durmiese
como un fauno
duerme
como cuando el zorro
se casa
su mujer se presenta
desnuda en escena
él crece en su sombra
simulando un monstruo
y aullen
los cascabeles
cuando la mujer ofrezca
un gallo deshuesado
— fauno,