una voz que me arrulla

hay una voz
que me arrulla arrulla me arrulla
arrulla arrulla
me arrulla arrulla arrulla
arrulla arrulla arrulla arrulla y
me arrulla arrulla
arrulla arrulla arrulla arrulla
arrulla arrulla
arrulla arrulla
arrulla
y la dulzura me arrulla
arrulla arrulla
eso es
y recuento
un grano
otro grano
una espalda que cambia de nombre
y te digo
«tu culo
mi némesis
la moby dick
de mi corazón ahab,
un cachalote
sin profundidad
y agitando mis brazos
¡mis labios
que no van a nínive!»
— fauno,